SPIC-Zuma Energía incluye a comunidades y colaboradores en su estrategia para alcanzar un futuro más sustentable

• Empresas en México tienen el reto de salvaguardar la integridad de sus empleados y el entorno en el que operan.

• La implementación efectiva de medidas HSEQ asegura el éxito a largo plazo de proyectos sustentables.

• A través del plan de gestión integral, SPIC-Zuma Energía reduce la brecha de pobreza energética, mejora la infraestructura básica y mejora economías locales.

La cultura de prevención de riesgos HSEQ (Salud, Seguridad, Medio Ambiente y Calidad) en empresas ha experimentado un cambio significativo en los últimos años; a medida que reconocen la importancia de salvaguardar la integridad de sus empleados y el entorno en el que operan, han comenzado a adoptar procesos en materia de seguridad laboral y responsabilidad ambiental. 

En el sector de las energías renovables, la implementación efectiva de medidas HSEQ es esencial para asegurar el éxito a largo plazo de proyectos y promover un verdadero desarrollo sostenible. SPIC-Zuma Energía, el segundo generador privado de energía renovable en México, comparte las principales acciones que se llevan a cabo en plantas y corporativos para garantizar la seguridad, proteger la salud, preservar el medio ambiente, estimular el desarrollo económico y fomentar la participación comunitaria.

Alberto Robles, director de HSEQ de SPIC-Zuma Energía, afirmó que “las metas sustentables de la empresa van más allá de la generación de energía limpia; también buscan un impacto positivo en las comunidades y las familias de cada colaborador”. Las ocho plantas solares y tres parques eólicos, que actualmente generan 1.3GW de capacidad instalada en México, cuentan con un plan integral de gestión que incluye la inversión social, mecanismos de diálogo, líneas de apoyo y atención a quejas. Además cuentan con personal de enlace social, quienes son el contacto directo de la empresa con las comunidades donde tienen presencia.

Desde su llegada en 2020, la empresa líder en renovables se ha alineado a seis de los 17 Objetivos de Desarrollo Sustentable de la ONU, estos son, salud y bienestar; educación de calidad; energía asequible y no contaminante; trabajo decente y crecimiento económico; acciones por el cambio climático y vida de ecosistemas terrestres.

Es importante señalar que las acciones sociales de la compañía se dividen en cuatro ejes: desarrollo de capacidades, mejora de la infraestructura básica, acciones contra la pobreza energética y apoyo a los servicios de salud locales. A nivel nacional se destaca la impartición de 25 talleres de salud comunitaria que ayudan a prevenir oportunamente enfermedades y mantener un buen estado de salud general de la población, así como 58 talleres educativos en los estados donde operan.

SPIC-Zuma Energía ha trabajado para impulsar la salud, seguridad y bienestar de los colaboradores en estados y zonas donde las condiciones sociales y geográficas presentan riesgos latentes. A través de líneas de emergencia y el contacto directo con autoridades, los colaboradores de la empresa han mejorado su calidad de vida, proporcionando tranquilidad a su familia.

Otra parte de la estrategia de sustentabilidad de SPIC-Zuma Energía incluye programas de capacitación en energías renovables a través de alianzas con academia, centros educativos y asociaciones comunitarias. Con estos programas se ofrece a los participantes un acercamiento real al sector en diferentes niveles educativos, desde educación básica hasta superior.

David Yang, Chairman de SPIC-Zuma Energía, afirmó: “Creemos firmemente que el éxito a largo plazo está intrínsecamente vinculado a la responsabilidad corporativa y el compromiso con la excelencia en HSEQ. Continuaremos trabajando incansablemente para mejorar nuestras prácticas y contribuir positivamente al bienestar de las generaciones presentes y futuras.”

Además de priorizar e invertir en la prevención de accidentes y campañas de salud en el trabajo, los programas que implementa la compañía reducen la brecha de pobreza energética, mejoran la infraestructura básica y aportan al mejoramiento de las economías locales. En colaboración con asociaciones locales se han realizado donaciones de equipos a bomberos, recuperación de espacios públicos, instalación de servicios de alumbrado en zonas con alto índice delictivo, el fomento a la autonomía económica, entre otras.

A casi años de haber llegado a México y con un firme compromiso a largo plazo con la transición energética de nuestro país, SPIC-Zuma Energía tiene claro que, garantizar un entorno sano de operación es parte principal de su estrategia para alcanzar un futuro más verde y sustentable.