DEPORTE, PIEZA FUNDAMENTAL PARA LA REINSERCIÓN SOCIAL DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
La UdeG brinda apoyos económicos a este sector de la población
Autoconfianza y motivación son algunos beneficios que da la práctica deportiva a las personas con discapacidad, señaló el jefe del Laboratorio de Psicología de la Actividad Física y del Deporte, del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS), de la Universidad de Guadalajara (UdeG), doctor Pedro Reynaga Estrada.
“El deporte puede constituirse como un elemento aconsejable dentro de las características de cada persona, y específicamente de quienes padecen alguna discapacidad. Se convierte en un elemento importante para su reinserción social, pero en especial para mejorar su salud. Ésta es la parte más importante dentro del campo de los beneficios físicos y psicológicos”, dijo.
Destacó la importancia de que las personas con discapacidad se propongan metas en su práctica deportiva, ya que el aspecto más importante para la motivación es la definición de objetivos personales, deportivos o grupales, y en ese sentido las metas constituyen un motor importante.
El especialista resaltó que, ante este tipo de situaciones, el primer reto a superar es dejar de asumirse como víctima y verlo como una oportunidad y un reto. Las recomendaciones para las personas con discapacidad que quieran incursionar en la práctica deportiva son acudir al médico para que defina el tipo de actividades que pueden realizar de acuerdo con su limitación.
“Plantearse objetivos en su desarrollo y de manera personal, además de lo deportivo, ya que eso les ayudará a mejorar como persona y en todos los campos, y a que se ponga en contacto con personas de características similares”, agregó.
Cuando se inició en el judo, motivada por su hermano, jamás imaginó hasta dónde llegaría su historia en el deporte. Con casi 20 años de trayectoria, la judoka Lenia Ruvalcaba Álvarez, egresada de la licenciatura en Cultura Física y Deportes de la UdeG, ha representado a México en tres ediciones de Juegos Olímpicos (Beijing 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016), y participado en otras competencias nacionales e internacionales.
Su debilidad visual no ha sido impedimento para destacar tanto en el deporte paralímpico como el convencional, lo que le valió recibir el Premio Nacional del Deporte en 2016, y ha sido una verdadera impulsora del deporte adaptado.
La universitaria explicó que el deporte para las personas con discapacidad es de vital importancia, primeramente porque permite conocer a personas con las mismas capacidades físicas.
“El deporte ayuda a las personas que sufren de alguna discapacidad. El problema es que existe aún la gente que le da pena salir o llevar a sus familiares que tiene algún problema a que practiquen el deporte, y no debería de ser así, porque es una oportunidad para mejorar física, mental y socialmente”, declaró.
En materia de alto rendimiento consideró que el panorama se ve difícil, ya que la competencia en el ámbito internacional se pone cada vez más complicada, y aunque en los pasados Juegos Paralímpicos se obtuvieron buenos resultados, disminuyó el número de medallas para el país.
“El deporte paralímpico tiene que trabajar más y retomar el cuadro de medallas de antes. Nos estamos rezagando, y si no hay un plan para los próximos juegos, México puede ir descendiendo en cuestión de preseas”, agregó.
La Universidad de Guadalajara, con el objetivo de brindar condiciones equitativas de aprendizaje a todos sus estudiantes, independientemente de sus antecedentes sociales, culturales y de sus diferentes habilidades y capacidades, desarrolla el Programa Institucional de Inclusión, que apoya a distintos grupos vulnerables, entre los cuales se encuentra la población con discapacidad, a la que se beneficia con programas de estímulos económicos.
La prevalencia de la discapacidad en México para 2014 era de 6 por ciento, según datos de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica de ese año, lo que equivale a 7.1 millones de habitantes. El número de mujeres con discapacidad es de 3.8 millones, mientras que el de hombres es de 3.3 millones, de acuerdo con la misma encuesta.